He recibido una llamada de una madre cansada y agitada de pasar cada día del año horas y horas en el hospital cuidando de su hijo. Al final ha llegado el momento en que ya no hay marcha atrás y toca partir y descansar. La vida y los sueños terminan y el recuerdo se queda acompañada por la angustia y la desesperación del tiempo que nunca se recupera. Amor . Amor en largos silencios. Amor en miradas aletargadas en el tiempo. Sin consuelo o alivio, quizás para alguno si pero hay que saber dosificar esos sentimientos encontrados y se necesita tiempo. Acompañar , escuchar, abrazar . Sólo esto es lo que hoy toca.
A Nacho .
viernes, 12 de octubre de 2018
Sedación. La cuenta atrás
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario