La gran mayoría de las personas que se convierte en abuelos ha cuidado alguna vez a sus nietos y, aunque en algunas oportunidades la tarea se puede convertir en algo bastante difícil de realizar, una nueva investigación reveló que es bueno para la salud y prolonga los años de vida en comparación de aquellos que no cuidan o conviven tiempo con sus nietos.
Los datos analizados en adultos mayores mostraron que quienes cuidaban a sus nietos viven más tiempo, debido a que la energía que transmiten los niños y sus “travesuras” que los mantienen corriendo tras ellos provoca que las personas mayores se mantengan fisicamente más activas, joviales y con menores indices de estrés.
Sin embargo, una exageración puede cambiar considerablemente los beneficios que aporta a la salud.
Por esta razón, es importante mantener un equilibrio para que los adultos mayores sepan regularizan sus sensaciones. Y es que saber mantener la armonía en el cuidado de los pequeños, aporta a la vez el beneficio de la interacción social.
Además, ayuda a mantener la mente sana, ya que los niños suelen tener preguntas todo el tiempo, por lo que incrementan la estimulación cognitiva y reducen las probabilidades de que se desarrollen enfermedades como la demencia o el Alzheimer.
En el caso de no tener nietos no todo está perdido, debido a que otros resultados expusieron que aquellos adultos mayores que ayuden a otras personas como amigos o vecinos también reciben algunos de estos beneficios, aunque sí destacaron que los efectos no son tan positivos como en el caso de cuidar a los pequeños.
Por otro lado, existen beneficios que reciben los nietos al estar en compañía de sus abuelos que independiente de los mimos que les entregan, los abuelos son capaces de inculcarles a los niños una vida más saludable y les fomentan la realización de actividad física al aire libre.
Además, les entregan estabilidad emocional y un apoyo extra que no siempre reciben de sus padres, por lo que todos se ven beneficiados.
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