Cuando estás en contacto con personas que sabe que se están muriendo y que te abrazan y en ese instante sientes en lo más profundo que el alma se apaga y sientes un frío helado que te corre por las venas, entonces es cuando ya no temes a la muerte. La paz te envuelve de tal manera que el sufrimiento desaparece de repente. No tengo miedo a la muerte por que va a llegar y a medida que té das cuenta de que los años pasan, más cerca está la luz. La carga pesa, cada día se añade una piedra más al largo camino recorrido. Y cuando ese peso llegue a su límite terminará la agonía. Ni amor, ni odio, ni gloria, ni pena. La nada . El silencio....
viernes, 19 de octubre de 2018
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