Cartas con el corazón

Leyendo las cartas diarias que mandabas llenas de amor, pasión. Callado tantas veces reprimiendo tu verdadero yo, aquel que conocí hace tanto tiempo. Los fantasmas del pasado se adueñaron de ti, olvidando de quién eras. Olvidando amar y sentirte amado. Te equivocaste y quizás yo también, por no encontrar la manera de abrir los ojos y cambiar. Todo es posible, lo has visto, lo has sufrido y al abrir tus manos vacías, recordaste que me querías. Nunca es tarde si el tiempo deja. Pero es el tiempo quien decide también colocar el futuro de cada uno. Es bueno saber que estoy bién, que estás bién. Y que amamos con el alma. Quizás nadie entienda. Al fin y al cabo cada uno somos dueños de nosotros mismos. Ser feliz es la meta y cuando se llegue a la meta se hallará la felicidad. Tiempo al tiempo. Todo llega....